El ovocito, llamado también oocito u ocito es una célula germinal que poseen las féminas que al convertirse en un óvulo maduro permite la reproducción.  Este proceso comienza cuando varios de ellos al mismo tiempo, empiezan a desarrollarse y únicamente uno llega a convertirse en óvulo maduro.  Este, es liberado en el período de ovulación.

Las mujeres por naturaleza propia y en condiciones sanas, poseen alrededor de 400.000 ovocitos en sus ovarios.  Con el pasar de los años la mujer va perdiendo de manera natural ovocitos, proceso que se conoce como atresia.  Lo que quiere decir, que a medida que la mujer avanza en edad le es más difícil concebir ya que tendrá menos ovocitos o corre el riesgo de no poder concebir un niño sano.  A los 35 años solo posee un 10% de los ovocitos.

Al ser liberado tan solo uno en el proceso de ovulación, el resto es desechado del organismo a través de la menstruación.

Si el ovulo maduro es fertilizado, se convierte en embrión y es cuando comienza el proceso de embarazo.

Motivos para requerir una donación de óvulos

Las causas que conllevan a una mujer a requerir una donación de óvulos pueden ser variadas pero la principal es no poseer la cantidad necesaria de ovocitos en su organismo o que estos se encuentren atrofiados.

También existe la llamada menopausia precoz, significa que una mujer en edad temprana ya no tenga óvulos disponibles.

Otra causa por la que algunas mujeres no logran concebir de manera natural, sería por alguna enfermedad donde necesariamente habría que extirpar sus ovarios.  Médicamente también se recomienda el no tener hijos en aquellos casos donde existen enfermedades hereditarias.

Es en estos casos, donde sería necesario una donación de óvulos.

El acto de donación

La donación es un hecho en el cual, una mujer cede a otra algunos de sus óvulos de la reserva que tiene para que esta pueda tener un hijo.

Dicho suceso debe ser de manera anónima, ya que la idea no es perseguir algún reconocimiento por el acto, debe ser un evento solidario, íntimo y voluntario.  La donación en la mayoría de los casos, es la única opción que tienen algunas mujeres para concebir.  Lo puede ejercer cualquier mujer que se encuentre en sanas condiciones.

el acto de la donación de óvulos

La persona que desee realizarse un implante de este tipo, deberá dirigirse a un lugar autorizado por la Legislación del país en que reside para comenzar los trámites.

Cuando ya se consigue el donante, en primer lugar se debe coordinar el ciclo menstrual en ambas, es decir, de quien da y quien recibe sea igual.  Esto se logra a través de un tratamiento médico y no es tan complicado lograrlo.

A la donante, le es aplicado un tratamiento de manera tal que madure más de un óvulo en su período, ya que no todos los que va a ceder llegan a ser útiles en el proceso.  Los óvulos a donar, son extraídos luego directamente desde los ovarios a través de un método de aspiración.

Por su parte a la receptora, a través de tratamiento médico, se le va preparando el endometrio para que llegue a las condiciones requeridas y poder alojar el embrión.

Las técnicas utilizadas consisten en lo siguiente:

  1. La primera llamada fertilización in vitro, consiste en la fecundación de los óvulos donados con semen de la pareja de la receptora.
  2. La segunda llamada inyección intracitoplasmática de espermatozoides y que es complementaria de la primera, consiste en introducir de manera manual un espermatozoide en el interior del óvulo de manera microscópica. Cuando ya este óvulo está fecundado, se introduce en el útero de la receptora.

Características que debe tener la donante

Cada país tiene su propia legislación respecto a este tema, pero en general los requisitos o características que debe poseer la donante son las mismas.

En primer lugar, se requiere su mayoría de edad y como requisito indispensable que sea una mujer sana tanto física como psíquicamente.  Se debe encontrar en un período de edad adecuada, la cual podría estar entre los 18 y 35 años. Además de no tener ningún tipo de infección vaginal.

Se le practica un examen físico donde se especifican todas sus características, color de piel, color y textura de cabello, color y forma de ojos, etc..  Aparte de esto, también se le realiza un análisis médico completo.

Sus antecedentes familiares también deben ser estudiados, ya que se debe determinar la existencia de enfermedades hereditarias.

Los riesgos que se pueden presentar en una donación de óvulos

Con respecto a la donante, se puede decir que existen varios riesgos ocasionados por los medicamentos aplicados para estimular las hormonas.

En primer lugar, los síntomas son muy parecidos a los que se presentan durante el período de menstruación.  Sin embargo; existen otros más complicados o más fuertes como lo es el síndrome de la hiperestimulación ovárica, que provoca la aparición de una cantidad mayor de folículos en el ovario.  Este es causado por la inyección de la hormona que ayuda a la maduración del óvulo antes de la punción folicular.  Si esto sucede, se debe suspender el tratamiento.

De no detenerse a tiempo este tratamiento, pueden generarse en la donante consecuencias como fuertes daños en los sistemas de su organismo.  Como síntomas leves se pueden mencionar fuertes dolores de cabeza, lumbares, debilidad, inflamaciones, vómitos, entre otros.

Todo esto sucede durante el período de menstruación, una vez culmina desaparecen estos síntomas.

Es de suma importancia el hecho de que este síndrome no es común, es decir, no se presenta en todas las mujeres.  Además, los rigurosos estudios que se le hacen a la donante antes del acto hacen posible su prevención.

La punción folicular para extraer el óvulo se hace a través de una pequeña intervención quirúrgica con la persona sedada y a pesar de que una vez realizada los síntomas son leves (como un suave manchado), puede surgir alguna infección bacteriana.

Es muy importante que la donante comunique al médico tratante los síntomas que va sintiendo durante el proceso para prevenirlos.

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